30-09-2015 // Viajamos en el tiempo una vez más, ahora al año 2000, y fue Eduardo Galeano quien dijo alguna vez: «Aunque no podemos adivinar el mundo que será, bien podemos imaginar el que queremos que sea. El derecho de soñar no figura entre los treinta derechos humanos que las Naciones Unidas proclamaron a fines de 1948. Pero si no fuera por él, por el derecho de soñar y por las aguas que da de beber, los demás derechos se morirían de sed. Asi que vamos a delirar, deliremos, por un ratito. El mundo, que está patas arriba, se pondrá sobre sus pies».
De Goyeneche a Tarantino, 30-09-2015 (descargar)